El vino, es un producto muy consumido en casi todo el planeta. Pero lo que muchas personas no sabes es el proceso al que debe someterse y de qué manera se debe almacenar para asegurar que su aroma y su sabor cumplan las expectativas de las personas. Para esto, existen miles de personas que aprendieron a través de los años el cómo manejar una bodega de la mejor manera. Y hoy te vamos a mostrar algunos de los tips que debes tomar en cuenta si estás empezando en este mundo y no posees muchos conocimientos.
Primero que nada, debemos tener nuestra empresa completamente organizada. Esto nos ayudará a ahorrar tiempo y evitar que algo pueda salir mal. Es importante que contemos con un software de gestión de bodegas para que este te ayude al momento de hacer el inventario. Saber los precios de cada producto y muchas cosas más. Gracias a estos programas, hoy en día podemos disfrutar de una gran cantidad de beneficios automatizados.
Tips para manejar tu bodega
Como primer tip, te recomendamos evitar por completo que los vinos sean expuestos a la luz. Es recomendable que se almacenen en un garaje o sótano. En caso de no disponer de uno, entonces puedes utilizar un cuarto. Pero para esto debes tapar las ventanas para evitar que la luz solar pueda estropear el vino, especialmente si es vino blanco. También es importante que utilices estantes fáciles de limpiar para eliminar cualquier tipo de acumulación de polvo y otras sustancias.
Por ilógico que suene, debes proteger el vino del ruido. Las vibraciones de los ruidos muy violentos, afectan la armonía que se debe producir en el vino. Afectando su sabor si no tomamos las previsiones necesarias.
Como punto más importante, podemos mencionar la temperatura. Este es el punto clave para que nuestro vino alcance su almacenamiento de la mejor manera. Gracias a la tecnología de hoy en día, existen neveras encargadas de la preservación del vino. Por lo que podemos evitarnos un gran dolor de cabeza adquiriéndolas. La temperatura óptima en la que debe ser almacenado un vino es entre 5º y 18º centígrados. Pero para poder disfrutar de él como se debe, es recomendable almacenarlos entre 10º y 12º centígrados.
Cabe destacar que los grandes cambios de temperatura de forma brusca, afectarán el sabor del vino de una forma muy negativa.
La posición es otro de los puntos más importantes al momento de almacenar nuestros vinos. Es sumamente importante que sean almacenados en posición horizontal. Esto ayudará a que el corcho se mantenga húmedo y así evitaremos que se seque y se quiebre, permitiendo filtraciones al vino. Para el caso de vinos espumosos, cavas, champagnes, lambruscos, vinos de aguja, prossecos, existe una tendencia que indica que es mejor mantenerlos verticalmente. Ya que, ayudará positivamente al sabor y conservación de los tipos mencionados.
No mover el vino
Algo que muy pocas personas conocen, es la importancia de no mover los vinos al menos que sea completamente necesario. Y es que mientras más añejado esté el vino, las posibilidades de que se estropee si lo movemos, son muy altas.
